marzo 04, 2007

De luto a júbilo

¿Cuándo dejé de ser la víctima para ser el victimario que se encarga de dañar y herir la llaga ya abierta?
¿Cuándo me reí de la tibieza de tus venas que expuestas y hermosas traspasaron su calidez a mi ser?
¿Cuándo elegí hacerte mi pasatiempo mejor y me olvidé de mi propio olvido?
¿Cuándo hice elecciones inciertas que hoy se tornan en contra de mí?

Cuando haya sufrido todo lo que tenga que sufrir,
Cuando las lágrimas ya no emanen más ese olor a dolor tibio,
Cuando mi alma sienta que puedo acompañar de la mano el perdón, sabré ciertamente que he sanado,
Cuando camine con el semblante en alto y pueda perdonarme por todo lo herido,
Cuando mi vida calle para dar paso al más sincero silencio y sólo mi mirada pueda hablar desde la distancia,
¡Entonces!, ¡entonces habré sanado!

Y ya no vestiré más luto por la muerte de mi fe en los hombres,
Porque uno me hizo creer que ellos mentían, el que amaba con seguridad no sabrá de mi alegría.
Y vestiré mágicos colores que iluminarán la vida, mi alma y la faz de mi tierra, aquella que un día guardó silencio, mientras nos contemplaba a oscuras prometiéndonos mil promesas que hoy no son.

1 comentario:

Alimontero dijo...

Querida Su, todos los días la vida nos muestra que vamos dejando cosas, experiencias, dolores y alegrías atrás. Y eso es dejar morir.Porque si algo tenemos cierto es que cuando nacemos sabemos que moriremos. Solo que pensamos que esa muerte es solo la física, la de nuestro cuerpo, y te digo que eso es lo que nos tiene mal parados hoy. Por eso tememos y nos retraemos a esta palabra. Tu, con este post moriste a la que eras, te re-descubriste y ya sanaste... de lo contrario no habrias declarado tu nuevo Ser en este post. Bienvenida a la vida! ...porque cada minutos decidimos por la vida, porque muriendo es como renacemos... te suenan esas palabras?